LA CARA DETRÁS DE GHAZAL: NUESTRA HISTORIA
Soy Johana Vásquez, y quiero compartir contigo cómo nació Ghazal, una historia de fe, amor y propósito que ha transformado mi vida.
En junio de 2018, después de un tiempo profundo con Dios, nació Ghazal, con el propósito de crear accesorios que pudieran impactar y conectar con la esencia de las mujeres. En ese momento, estaba más centrada en mi profesión que en la marca, pero cuatro meses después, de manera inesperada, fui despedida. La incertidumbre del desempleo me llevó a buscar respuestas y explorar oportunidades que parecían estar fuera de mi alcance, pero algo dentro de mí me decía que ese no era el camino que debía seguir.
Fue entonces cuando tomé una decisión importante: dejar atrás mi carrera profesional y dedicarme a darle forma a este sueño. Con incertidumbre, pero llena de esperanza, comencé a construir Ghazal desde cero, confiando plenamente en que el propósito que Dios había puesto en mi corazón guiaría mi camino.
El primer año fue muy difícil. Las oportunidades eran pocas, las ventas no llegaban y cada día me enfrentaba a nuevos retos. Fue un año de constante lucha entre la razón y el corazón, entre la duda y la esperanza. Aunque todo parecía incierto, la fe y la resiliencia me mantenían en pie, impulsándome a continuar a pesar de las dificultades.
A finales de 2019, Dios me regaló un nuevo capítulo en mi vida al unir mi camino con el de mi esposo. Él se convirtió no solo en mi compañero de vida, sino en un pilar fundamental para esta marca. Ha sido mi apoyo incondicional, mi mayor motivador y quien me ha recordado, una y otra vez, que los valores que sostienen mi vida también son los que sostienen esta marca.
Ghazal es el resultado de esa búsqueda por algo más grande:una marca que celebra la gracia y la resiliencia que todas las mujeres llevamos dentro. Es un reflejo de los momentos de fe, de los desafíos superados y de la fuerza que encontramos cuando nos atrevemos a confiar en lo que Dios ha depositado en nuestro corazón
Quiero que cada accesorio que encuentres aquí sea más que un simple detalle; quiero que sea un recordatorio de tu belleza interior, de tu fortaleza y de todo lo que eres capaz de lograr. Porque, aunque los comienzos puedan ser difíciles, siempre hay algo hermoso esperando al final del camino.
¡Gracias por ser parte de esta historia y por permitir que Ghazal sea parte de la tuya!